La ley de Fleischer en la determinación pre-natal del sexo de un bebé

Muchas mamás quieren saber el sexo de su bebé antes de que se vea en la ecografía, en muchos casos aún después de haber pasado por una de ellas porque el niñito o niñita no se ha dejado «ver». El sistema del que hablaré, lo he aplicado en muchísimas oportunidades con excelentes resultados. El procedimiento es tan simple que no requiere más que conocer el día de nacimiento de los padres (ni siquiera la hora) y la fecha probable del parto. Por otra parte, conociendo este método será fácil calcular la fecha propicia para concebir un hijo del sexo deseado, con una probabilidad de éxito en matrimonios fértiles de alrededor del 90%. En este escrito desarrollaré un procedimiento astrológico muy simple, sobre la determinación prenatal del sexo, para averiguar astrológicamente y previo a un nacimiento, cuál será el sexo del bebé.

Alfred Fleischer, [8/06/1901, 22:00 GMT, Hannover (52N22/09E44)] según él mismo cuenta, era músico de cámara de una orquesta estatal. Debido a una caída que tuvo lugar el 6/8/1956, sufrió la fractura del brazo derecho y una profunda herida en la mano que lo incapacitó para seguir ejecutando. Solicitó y obtuvo una pensión por invalidez y se dedicó a buscar explicaciones astrológicas del accidente en su tema natal. Pero, como en un comienzo se limitaba a los tránsitos, no halló en ellos razones suficientes para su desgracia. Pasó entonces a investigar las lunaciones y decidió erigir el tema para su ciudad natal de la Luna nueva previa a su nacimiento,  que había tenido lugar el 18 de mayo de 1901, a las 5:37 GMT.

Para su sorpresa, Saturno en tránsito el día del accidente estaba en el grado 26 de Escorpio opuesto al Sol y a la Luna de dicha lunación en el mismo grado del signo de Tauro. Además, se hallaba Saturno en oposición a la violenta estrella fija Algol, conjunta al punto en cuestión.
Llevado por el interés en las lunaciones, levantó el tema de la Luna llena anterior a su propio nacimiento y luego pasó a hacer otro tanto con las de su madre (temas de la Luna nueva y llena previos al nacimiento de ésta). Para su asombro comprobó las siguientes relaciones entre los temas de las cuatro lunaciones mencionadas:

Madre:

Luna Nueva   »  Asc.  29º 59´ Leo

Luna Llena    »  Asc.  04º 32´ Cáncer

Hijo:

Luna Llena    «  Asc. 00º 56´ Virgo

Luna Nueva   «  Asc. 03º 06´ Cáncer

(Obsérvese la proximidad de las cúspides)
Después de muchas otras investigaciones logró arribar a la siguiente:

Ley de Fleischer

Si los ejes de las lunaciones previas al nacimiento se relacionan con los correspondientes a las lunaciones anteriores al nacimiento de la madre, nacerá un varón. En cambio, si se relacionan con los ejes a las lunaciones al nacimiento del padre nacerá una niña.

La relación puede ser la conjunción de los ejes pero no siempre es así; también pueden darse oposiciones o cuadraturas o bien el Ascendente o el MC correspondiente a las lunaciones de la criatura pueden estar en conjunción con el Sol o la Luna de uno de sus padres. Esto determina el sexo dependiendo con cual de los padres se establece el contacto. 

Ejemplo 1: Familia T. Caso citado por Fleischer. Recordemos que sólo interesa la fecha, pero no la hora de nacimiento.

Madre nacida el  10/01/1916, en Regensburg (49N01/12E05). Veamos los temas de la Luna llena y nueva anteriores a su nacimiento.
Luna Nueva: [5/01/1916, 4:46 GMT]

Sol/Luna:      13º Capricornio

Asc.:            10º Sagitario

MC:              07º Libra

Luna Llena: [21/12/1915, 12:52 GMT]

Sol:            28º Sagitario

Luna:           28º Géminis

Asc.:            17º Tauro

MC:              22º Capricornio

El primer hijo fue varón y nació el 23/03/1944 en Bamberg (49N53/10E53). Veamos sus lunas anteriores al nacimiento: 

Luna llena: [10/3/1944, 00:28 GMT]
Sol:            19º Piscis

Luna:           19º Virgo

Asc.:            08º Sagitario

MC:              05º Libra

Luna Nueva: [24/02/1944, 1:59 GMT]

Sol/Luna:      04º Piscis

Asc.:            15º Sagitario

MC:              14º Libra

Veamos la relación de los temas de la madre y el hijo:

  1. El ascendente del tema de Luna nueva de la madre coincide con el ascendente de la Luna llena hijo.
  2. El MC del tema de Luna nueva de la madre coincide con el MC de la Luna llena hijo.

La coincidencia de los ejes es notable y se halla bien a la vista. Pero también son notables las conjunciones Marte-Saturno angulares. (En la Luna llena, además, Urano se halla opuesto al Ascendente) en las lunaciones del hijo, y esto abre un nuevo enfoque pues tales aspectos en las lunaciones previas inciden grandemente en la salud y/o duración de la vida del pequeño. Este niño por ejemplo sólo alcanzó a vivir 15 minutos.

En el caso que un nacimiento aconteciera o tuviera una fecha probable de parto para un momento inmediatamente antes de una lunación, es necesario tomar la lunación  posterior al nacimiento o a su fecha probable.

Para comprobar la eficacia del método, tomaremos ahora el ejemplo de un matrimonio con  7 hijos. Tomaremos sólo algunos de los hijos de la pareja,  trabajamos con cúspides de Placidus.

Ejemplo 2: Familia G

Madre nacida el 30/11/1933 en Punta Alta, Argentina  (38S53/62W05). Veamos las lunas previas a su nacimiento:

Luna nueva: [17/11/1933, 16:23 GMT]

Sol/Luna:      24º Escorpio

Asc.:            05º Piscis

MC:              02º Sagitario

Luna Llena: [2/11/1933, 7:59 GMT]

Sol:             09º Escorpio

Luna:           09º Tauro

Asc.:            14º Libra

MC:              08º Cáncer

Padre nacido el 12/4/1924 en La Plata (34S55/57W57). Veamos las lunas previas a su nacimiento:

Luna nueva: [5/03/1924 15:57 GMT]

Sol/Luna:      14º Piscis

Asc.:            01º Géminis

MC:              13º Piscis

Luna Llena: [20/02/1924 16:07 GMT]
Sol:              00º Piscis

Luna            00º Virgo

Asc:             22º Tauro

MC:              01º Piscis

Primer hijo nacido el 16/09/1956 en La Plata. Veamos las lunas previas a su nacimiento:
Luna nueva: [4/09/1956, 18:57 GMT]

Sol/Luna:      12º Virgo

Asc.:            10º Acuario

MC:              02º Escorpio

Luna Llena: [21/08/1956, 12:37 GMT]

Sol:             28º Leo

Luna:           28º Acuario

Asc.:            17º Libra

MC:              10º Cáncer

Vemos que:

  1. Sol y Luna en el tema de la Luna nueva previa al nacimiento del padre están a 14º Piscis y el MC a 13° Piscis y el MC de la Luna llena previa al nacimiento del bebe está en trígono a estos puntos a 10º de Cáncer.
  2. La Luna Llena previa al nacimiento del hijo se da  en el grado 28 del eje Acuario/Leo, mientras que en la Luna llena previa al nacimiento del padre se situaba muy cerca de ese punto en el grado 0 del eje Virgo/Piscis.

El bebe tenía que ser niña y efectivamente así fue.

Tercer hijo nacido el 2/09/1959 en La Plata.
Luna Nueva posterior al nacimiento:

[3/09/1959, 1:55 GMT]

Sol/Luna:      09º Virgo

Asc.:            05º Tauro

MC:              09º Acuario

Luna Llena previa al nacimiento:

[18/08/1959, 12:50 GMT]

Sol:             24º  Leo

Luna:           24º Acuario

Asc.:            16º Libra

MC:              09º Cáncer

Destacaremos, entre otras relaciones:

  1. El Ascendente de la Luna nueva del bebé está en conjunción a la Luna del tema de Luna llena de la mamá.
  2. Sol y Luna de la Luna nueva del bebé están en trígono a la Luna y en sextil al MC de la Luna llena de la madre.

Concluiremos que, efectivamente, fue un varón.

Desgraciadamente, no siempre es fácil decidir si va a ser nena o varón, porque pueden existir simultáneamente relaciones con los ejes tanto del padre o de la madre, como en este caso. Privilegiaremos entonces el orbe más cerrado y evaluaremos también la cantidad de contactos para un lado y para el otro.

Hay otra técnica muy conocida por los astrólogos, la de Grimm-Reichelt-Jonas a la que vamos a dedicarle unas palabras.
La Astrología conoce desde siempre la importancia de la Luna en cuanto a su influencia sobre los fluidos corporales en cantidad y su química, esto último especialmente en relación a su Ph o medida de acidez o alcalinidad.
Parecería ser que la Luna transitando por signos masculinos aumenta la alcalinidad de la secreción vaginal y del fluido espermático, lo que favorece el desarrollo de los espermatozoides “masculinos” y la destrucción de los “femeninos” durante la unión sexual. En cambio, si transita por los signos femeninos, aumenta la acidez de ambos fluidos, favoreciendo el desarrollo de los espermatozoides “femeninos” y la destrucción de los “masculinos”.
Paralelamente, y siempre de acuerdo a la Tradición, resulta obvio que la ovulación, proceso previo indispensable para la fecundación, debería estar regida o indicada por alguna relación entre el Sol (dador de vida) y la Luna (significadora de las funciones femeninas cuyo ciclo de 28 días para mayor analogía, coincide con el de la mujer). Lo importante es determinar cuál es la relación Luna-Sol. La respuesta, fruto de la observación y la experiencia, vino dada por una técnica astrológica clásica que se remonta a Placidus de Titis, sino al mismo Claudio Ptolomeo, que alude a ellas (en forma más o menos velada) en el Tetrabiblos. Esta técnica es la de las Revoluciones sinódicas o embolísmicas, que se refieren a la relación del ángulo Sol-Luna en el momento de nuestro nacimiento consisten en lo siguiente:
Supongamos que un nativo nace con el Sol a 10º Tauro y la Luna en 20º de Géminis. Entre ambas luminarias hay un ángulo eclíptico de 40º que mediremos siempre del Sol a la Luna en el sentido de los signos. Al mes siguiente la Luna más veloz que el Sol, lo alcanzará para más tarde llegar a formar el mismo ángulo elíptico que en el momento del nacimiento.
Para el instante en que la configuración natal se repite, se levanta un tema, con la latitud y longitud donde se halla el nativo. Ese tema es una revolución sinódica donde el ángulo entre el Sol y la Luna debe medirse siempre desde el Sol hasta la Luna, en el sentido de los signos (como en el rádix). Un mes más tarde se repetirá esta configuración natal nuevamente y se levantará una segunda Revolución sinódica y así sucesivamente.
La primera sinódica post-natal representa los sucesos desde que el nativo cumple un año hasta que cumple dos años, la segunda sinódica corresponde al período que media entre el segundo cumpleaños y el tercero y así sucesivamente. La sorpresa consistió en comprobar que las Revoluciones sinódicas no solamente funcionaban a la manera de las Revoluciones Solares sino que también estaban muy estrechamente ligadas a la ovulación y los períodos de fertilidad en las mujeres con funciones regulares.
Alrededor de 1956 un médico checoeslovaco (no era astrólogo)  de origen húngaro, el Dr. Eugen Jonas redescubre la técnica y consigue finalmente el apoyo oficial de la Academia de Ciencias de Praga. Las conclusiones que obtuvo vamos a sintetizarlas así:
1) Alrededor del 87% de las mujeres en edad de concebir son fecundadas cuando se repite la configuración Sol-Luna que tenían en el momento de su nacimiento (vale decir cuando pasan por una Revolución sinódica). Cuando en esa Revolución sinódica la Luna atraviesa signos masculinos-positivos (fuego/aire) el sexo del bebé será masculino. Si la Luna se halla en signos femeninos-negativos (tierra/agua) el sexo, será femenino. Esto se confirma estadísticamente en un 96% de los casos. La no totalidad corresponde en gran parte a los casos de nacimientos múltiples que aún son un fenómeno mal comprendido.

2) Las investigaciones del Dr. Jonas pusieron de manifiesto que es peligroso aplicar la regla anterior cuando la madre ha nacido en Luna Llena, por el peligro de traer al mundo niños con deformaciones congénitas.

3) El mismo peligro existe según el Dr. Jonas cuando en los momentos de concepción se forman en el cielo aspectos disonantes de planetas mayores (Júpiter a Plutón inclusive). Por esa razón, es importante que los padres se abstengan de encargar los hijos en los días en que la Luna tenga malos aspectos. Esto destaca la importancia del tema de concepción el que no es usado más frecuentemente por lo difícil de su determinación como única y exclusiva razón.

4) El biorritmo ha sido también tomado en cuenta en estas investigaciones. Según las investigaciones del Biorhytm  Research Inc., la concepción de varones parece vinculada a días con lato valor de biorritmo físico y valores bajos del biorritmo emocional, mientras que para la concepción de mujeres esto sería a la inversa. No obstante, el factor del biorritmo debe subordinarse a los antedichos de tipo cósmico, por ser de mayor importancia estos últimos; tal como lo comprueban las estadísticas.

Mencionemos, además, que el Dr. Kurt Rechnitz, profesor en Budapest y exdirector de la clínica obstétrica de esa ciudad, aplicó los descubrimientos del Dr. Jonas al control de la natalidad, logrando resultados satisfactorios y enormemente superiores a los del método Ogino- Knaus. Como anécdota podemos citar que la clínica del Dr. Jonas se llamaba “Astra”.
Diversas teorías se han elaborado para explicar estos hechos. Una de ellas, debida al prof. Dr. Golovanov, sugiere la existencia de un ritmo biológico en fase con el ritmo cósmico. Desde luego esto no es otra cosa que lo que la astrología viene enseñando y demostrando desde hace miles de años. Como información adicional de las sinódicas mencionaremos que la afamada astróloga Dorotea Zurlinden calcula las revoluciones “lunares” para el día en que el Sol y la Luna se hallan a la misma distancia que el día de su nacimiento, con la misma hora local del nacimiento y para el lugar en que se halla el nativo. Con este procedimiento afirmaba tener magníficos aciertos.

Bibliografía:

Astrología médica Moderna R. Jansky

Revistas del CABA 85/86/87, artículo del Dr. Spicasc sobre la determinación prenatal del sexo de un bebé.

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